¿En qué momento decidiste entrar en Juventudes Socialistas y por qué?
Entré de una manera atípica. Lo normal es entrar primero en Juventudes y luego en el PSOE, pero yo lo hice al revés. A los 18 años entré en el PSOE por mis inquietudes y por el trabajo que hacía mi alcalde y su equipo. A los años conocí gente que militaba en Juventudes y de ese contacto y viendo las acciones que realizaban y esa lucha más utópica que la del partido. Luego me arrepentí y me hubiese gustado entrar antes porque se me hizo muy corto. Puedes participar de una forma más directa desde Juventudes, hay más militancia activa,… Hay un abanico más amplio.
¿Qué le dirías a alguien que estuviese pensando en entrar en
Juventudes?
La primera respuesta que diría es que no se lo piense y que entrase. Si lo pienso fríamente, primero es si tienes compromiso y las ideas claras y con eso tienes la llave de entrada a esta organización. Militar no significa estar y no hacer nada, sino que cada uno con el tiempo que dispone intentar poner su granito de arena, pero siempre con un claro ideario. Hay que tener claro de dónde venimos y hacia dónde vamos, nuestras prioridades, nuestro público al que defender, qué beneficios queremos que tengan, etc. Si perdemos esto perdemos de vista cuáles son nuestras luchas. Hay una división social todavía con las clases sociales visibles en las tasas de desempleo o vulnerabilidad. El colectivo juvenil sigue siendo el más vulnerable.
¿Cómo recuerdas tu llegada a la alcaldía de San Juan de Mozarrifar?
Mi llegada fue con nervios, vértigos y momentos de no saber si hice bien o mal. Luego esas dudas se disiparon por el cariño y acompañamientos de vecinos, familiares y amigos. Dar el paso no es fácil. Yo tenía 22 años y el anterior alcalde nos comunicó su intención de no continuar. Desde la agrupación decidimos dejar pasar el verano para pensar si alguien quería presentarse. Le di muchas vueltas a la cabeza y pensaba “¿y por qué no?”. Lo consulté con mi familia y al principio se quedaron parados, pero enseguida me dijeron que adelante. Hice una ronda con mis compañeros y compañeras y vi buena predisposición en general. Finalmente di el paso y tuvimos primarias entre tres candidatos y salí elegido cerrándose filas en torno a la candidatura. Una vez siendo candidato y con la fecha de las elecciones acercándose te entran las dudas y ese gusanillo, pero teniendo las cosas claras y trabajándolo mucho salí elegido alcalde. Fue de las mejores experiencias y un momento muy bonito que no se olvida. Para poder cambiar las cosas hay que dar un paso adelante.
¿Cómo es tu día a día en el Instituto Aragonés de la Juventud?
Es como si estuvieras en una tensión constante. Nuestro público diana es la juventud y todo afecta a la juventud. Un día puedes trabajar en materia de vivienda, de deporte, salud, prevención, ocio, cultura,… No se realizan siempre las mismas acciones, sino que cada día es un mundo. La parte negativa es la dificultad para gestionar eso porque no puedes tener profesionales de todas las áreas e implica reciclarse continuamente y estar en pleno contacto con otras áreas, administraciones, etc. La parte positiva es el amplio abanico de políticas con el que cuentas y tienes que priorizar qué es más urgente.
¿Qué medida destacarías de tu paso por la alcaldía y por el IAJ?
Por la alcaldía sería, más allá de todo el tema de urbanismo y obras, la implantación de los programas de conciliación de niños y niñas. Si queremos que la gente se quede en la zona, además de servicios básicos, se necesita conciliación. Hicimos un programa conjunto para las épocas de verano, semana santa y navidad para poder tener espacios socioeducativos con programas educativos. Por el IAJ sería el Plan Retorno de Talento Joven Aragonés. Fue algo muy difícil de lanzar. Lo calificaron de utópico e imposible porque no era un plan al uso, sino que fue algo novedoso. Se sentaron las bases y se creó confianza. Llamamos a los jóvenes que estaban fuera de Aragón y les preguntamos. A día de hoy trabajamos con más de 540 usuarios y el 50% está ya aquí con puesto de trabajo con buenas condiciones. Poco a poco se amplían los servicios cada año. Se busca el puesto de trabajo, ayudamos al entorno familiar y un acompañamiento. Es muy duro el regreso y también se asesora emocionalmente porque vuelves con la mentalidad que te fuiste y todo tu entorno de aquí ha cambiado. Es muy duro de asimilar y te sientes extraño en tu propia casa. Al principio provocaba que la gente se venía pero se volvía a ir y ahora trabajamos incluso antes de venir en este tema.
Actualmente, ¿en qué se está trabajando en el IAJ? ¿Hay alguna cosa que
quieras destacar y que no sea muy conocida?
Este año hemos sacado dos asesorías muy importantes. Una asesoría de bienestar emocional, es decir, apoyo psicológico gratuito para jóvenes de toda la comunidad autónoma. Se ha implementado también una asesoría para víctimas de delitos sexuales. Durante el confinamiento hubo un incremento de agresiones sexuales a jóvenes, sobre todo menores. De cara a futuro estamos trabajando en modificaciones normativas en lo relativo a instalaciones juveniles.
¿Cuáles consideras que son los principales retos de la juventud?
Cambian a una velocidad muy rápida, aunque algunos se mantienen constantes en el tiempo. La posibilidad de crear un proyecto de vida integral y completo sigue siendo un reto y eso implica mejorar las condiciones laborales y se necesita un esfuerzo por parte del Gobierno de España que es quien tiene las competencias. En Aragón tenemos la menor tasa de desempleo juvenil del país, pero aun así es un 21´5%. El colectivo juvenil es el primero en inestabilidad en temas de contratación temporal y por lo tanto tenemos que hacer un esfuerzo continuo, junto con el acceso de vivienda. Dentro del plan de emancipación que estamos elaborando lo que queremos es poner algunas medidas, pero si no hay una política férrea en cuanto al acceso a la vivienda es difícil que estas medidas tengan efectividad. Otro tema muy importante es la salud mental, que se ha agravado con la pandemia, los confinamientos, el aislamiento social. La socialización se ha visto limitada y las consecuencias se verán a corto y medio plazo.
¿Qué hace Adrián Gimeno para desconectar?
Me lo pregunto muchas veces. Soy una persona muy nerviosa que necesita estar haciendo muchas cosas y es verdad que el trabajo me engulle tanto que veo que me falta tiempo para más cosas, pero con una planificación da tiempo a todo. Me gusta viajar, aunque en los últimos años casi no he podido hacerlo, aunque si salidas de día. También me gusta charrar con los amigos e intento buscar huecos todas las semanas para ver a amigos o familiares que hace tiempo que no veo. Te ayuda a tener los pies en el suelo, además de por tu propia salud mental y de desconexión. Yo no soy de hacer deporte, aunque lo recomiendo, pero no va en mi ADN.
¿Qué serie y qué libro nos recomendarías?
Como libro me gustó mucho la trilogía de Reina Roja porque lo que me gusta es la novela negra. Tiene muchos aspectos que a veces nos los podemos encontrar en nuestro día a día en el sentido de que vemos muchos problemas o los agrandamos cuando luego son una pequeñez y los grandes problemas no nos damos cuenta. Ahora me estoy empezando a leer GRM Brainfuck, una novela alemana sobre bandas juveniles. Es una comparativa de las problemáticas juveniles de la Alemania de hace unos años con la actual. Sobre series la que actualmente estoy viendo es La Casa de Papel.
¿Qué consejo nos das a las Juventudes Socialistas?
Cada momento tiene su historia. Al final los que estáis dentro de la organización en cada momento sabéis cuales tienen que ser las prioridades. Lo que se hizo hace unos años no vale para hoy. Hay que fijarse en los errores que se cometieron para no reproducirlos. Lo que creo que tienen que hacer las Juventudes es tener claro cuál es el objetivo marcado para la etapa en la que están e implicarse en el asociacionismo juvenil. Para mí, lo mejor de Juventudes es conocer a la gente que hay dentro, por lo tanto el hacer piña y que en las jornadas, además de aprender, puedas conocer al otro. Aunque yo ya no esté dentro sigo manteniendo contacto con quien si esta y con quien ha estado. Consejos sobre cómo actuar no me atrevo a daros porque sois vosotros quienes lo sabéis mejor que nadie.
Entrevista realizada por Miguel Lozano López y Andrea Sobreviela García, Secretario General y Secretaria de Organización de las JSA-Zaragoza.
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